martes, 17 de febrero de 2009

Patio de luces

Todavía duerme el patio de luces, se escucha el silencio de cada vida, a veces la respiración de los que sueñan.
Apenas un rayito de luz, y ya percibo un ligero olor a café, el tierno olor a mañana.
Esperando turno desde el vacío repleto de romero, y piedras.
A los pies de mi bañera , donde se escurre lo que sobra, se me cayó una sonrisa, que se me había perdido hace tiempo, se me volvió a perder.
Prefiero un susurro de música lejano, a un beso blanco, mudo, tal vez porque he podido comprobar como agarras la esperanza y la esparces en el aire, que llega a mis oidos enredada entre las cuerdas de tu melodía.
Se tambalea el verde que tiñe de abrazos mi tristeza, ahora lo que tengo es un sueño de siesta pegaito a mi cuello. Deseo que el tiempo me lo quite, creo que al tiempo le deseamos mas cosas de las que deberíamos...
Suena en mi corazón tu presente que anda dando saltitos como un niño que juega.

viernes, 6 de febrero de 2009

Olor a jazmín

Primero atravesamos lo inevitable, y más tarde las palabras son zadas de un tal vez, suspiro roto.Pero quizás te devuelves un silencio, y gotea olor a jazmín. Entonces la tarde se licúa y arden los pensamientos cantando...

Ivara

Ivara se mira al espejo, deja que suba el humo denso de su fragancia preferida.
Pronto recordará que tiene sueños que la cálida brisa otoñal tiñe de amarillo.
Se acaricia lentamente la cabeza como si en ella estubiera buscando una respuesta.
Solo le queda coger aire hondo, y dejar que de él emerga un sonido.
Solo quiso transparencia y se topó con una ventana opaca.
Nunca advierte una lágrima,nunca esconde una sonrisa. Nunca suele albergar más de tres lluvias en su parcela de silencio.
No es de las que corren por no saber volar.

Para que no me pierda

Me encanta esa sensación de haber estado lejos de mí, y si más, sentir que vuelvo a cada segundo,para mi, para no llorar, o al menos, hacerlo lo justo.
Un suspiro sale de mi, buscando las palabras para que no me pierda.

Tarde

Sé que hay algo mejor en algún sitio, entre los versos que nunca he escrito, pero se esta haciendo tarde, tarde para regresarme, por mirar atrás y pasarme la vida por delante.

Nada

Sentir que el tiempo se escapa renovando así cada segundo, cada secreto que mis manos puedan ofrecer.

A los catorce

Me escondo en cada latido, una lágrima emerge de un piano blanco.
Caen las hojas de este otoño que llega sin avisar, ya se esfumó ese olor caducado.
No encontré el camino, y el alba se rompió en un instante.
Todavía me abraza tu silencio, que con la boca cerrada pinta cada mañana en mis preguntas.
No me sirven las verdades si tengo frío, porque se convierten en mentiras disfrazadas.
Trato de acercarme a ti entre orillas de asfalto.

Eternos

Con mimos parecemos peces que se olvidan a cada instante, que renacen a cada segundo como si llegaran a ser eternos.

Atrás de los cristales

Atrás de los cristales, donde se separa el infinito de tus labios, crece el ancho de una mirada, que viaja más allá de donde se buscan, para crecerse libres aunque por instantes de reojo sean.
Cabe el cielo en un suspiro, que tal vez esté roto, y trepe como si del amanecer creciera un nuevo jardin..., su sonrisa.
Dejaré el sentío para echar a caminar, al laito del tiempo, de cualquier manera pasando cerca del mar.
Para seguir viviendo no me hace falta ná, yo tengo la manera, y ¿a mi que mas me da?.

Tu mirada

Me encantaría escribirte un poema sin palabras, como todo lo que tu mirada me dice.
Hoy se me desgarra el recuerdo, y anda cabizbajo buscando lo que fuimos por un instante.

Un cielo

Me acerco al fuego que todo lo quema, la luz de tu cara, la luz de tu cuerpo.
La carne que se espande por el suelo, ahí donde pusimos una cachito de nuestro corazón.
Aún hoy siento un cielo metidito dentro de mí.

Pasos

Que cómodo es decir, ¡ qué dificil!, y quedarse parao, mirando.
Que sencillo es resguardarse un pedacito pa sí mismo.
Hay tantas cosas por las que dar gracias, y otras tantas por las que cagarse en dios que,¿para qué perder el tiempo?.
La vida es un presente eterno, dicen muchas veces tus ojos.
Me detube en mi camino, me pesaban los sueños.
No esperaré a la primavera pa sonreir, de tí he aprendido.

Seguidores